¿Conoces a Batigol? Es un delantero argentino que nos obsequió momentos increíbles en el fútbol. Se destacó como uno de los mejores delanteros durante los años 90 y principios del siglo XXI. Su eficacia de cara al arco, con potentes disparos que alcanzaban hasta los 106 km/h, lo hizo famoso.
Comenzó su carrera en Newell’s Old Boys y luego jugó para River Plate y Boca Juniors. Sin embargo, su mayor impacto fue en la Fiorentina, donde se convirtió en el máximo goleador histórico de la Serie A con 207 goles.
Sin duda su carrera está llena de hitos emocionantes que reflejan su enorme talento. En esta nota, exploraremos la carrera de este excepcional futbolista argentino.
Infancia y primeros años: Newell’s Old Boys, Rivera Plate y Boca Juniors
Batistuta, conocido cariñosamente como Batigol, nació el 1 de febrero de 1969 en Avellaneda, Argentina. Comenzó su carrera profesional en 1988 con Newell’s Old Boys, donde llamó la atención del entrenador Marcelo Bielsa. Aunque inicialmente tuvo dificultades y fue cedido al Deportivo Italiano, finalmente encontró su lugar en Newell’s con la guía de Bielsa, quien mejoró su condición física y mental.
En 1988, debutó en Argentina con Newell’s Old Boys, anotando siete goles en 24 partidos durante una temporada en la que el equipo llegó a la final de la Copa Libertadores. Su desempeño excepcional lo llevó a los dos equipos más populares del país: primero River Plate, donde tuvo poca acción, y luego Boca Juniors, al que se unió en 1990.
En Boca Juniors, Batistuta se destacó como un delantero letal. Aunque al principio tuvo dificultades para encajar, brilló bajo la dirección de Óscar Tabárez, quien lo ubicó en el centro del ataque. Boca ganó el título nacional y Batistuta se convirtió en el máximo goleador de la liga en la temporada 1990-91, anotando 23 goles en 29 partidos.
Carrera en Europa y retiro
Después de un impresionante desempeño en la Copa América en 1991, Batistuta fue fichado por la Fiorentina. En su primera temporada en la Serie A con la Fiorentina, Batistuta anotó 13 goles, y en la segunda, marcó 16. A pesar de su brillante desempeño, el club sufrió el descenso a la Serie B. Pero Batistuta no se rindió. En la Serie B, continuó su racha goleadora con 16 tantos y ayudó a la Fiorentina a regresar a la máxima categoría.
La temporada 1994/95 fue su punto culminante. Con 26 goles, se convirtió en el máximo goleador de la Serie A. Junto a Rui Costa y Francesco Baiano, llevó a la Fiorentina a una racha invicta de 15 partidos y al cuarto lugar en la liga. Además, ganaron la Coppa Italia y la Supercoppa Italiana.
Durante nueve temporadas en ese club, anotó más de 200 goles en todas las competiciones, lo que le valió el apodo de “Batigol” por su potencia y precisión en el disparo.
La Roma: El gol imborrable
La AS Roma rompió récords mundiales al fichar a Batistuta. Su capacidad goleadora incendió el Stadio Olimpico. En un enfrentamiento épico contra su antiguo club, la Fiorentina, anotó una espectacular media volea desde larga distancia. Aunque no celebró el gol, saludó a los seguidores de la Fiorentina antes y después del partido.
El 17 de junio de 2001, Batistuta marcó el gol que aseguró el título de la Serie A para la Roma en una victoria por 3-1 sobre el Parma. La ciudad entera vibró con el rugido de Batistuta al convertirse en campeones de Italia, el primer título de liga de la Roma desde 1983.
Batistuta pasó tres temporadas en la Roma, marcando 30 goles en 63 partidos.
Retiro de Batigol
En 2003, tuvo una cesión poco espectacular en el Inter de Milán y luego se marchó al Al-Arabi de Qatar, donde recuperó su increíble forma goleadora de sus días en la Fiorentina, anotando 25 veces. Finalmente, acosado por problemas en el tobillo, Batistuta se retiró del fútbol en 2005.
Gabriel Batistuta y Argentina
La presencia de Batistuta en Argentina comenzó a sentirse en la Copa América de 1991 en Chile. El delantero se destacó como máximo goleador, anotando seis goles. Su contribución fue fundamental para que Argentina se alzara con el título. Al año siguiente, en 1992, Batistuta lideró al equipo argentino en la Copa FIFA Confederaciones. Una vez más su desempeño fue clave para que la albiceleste se coronara campeona.
En la Copa del Mundo de 1994 en Estados Unidos, Batistuta brilló con cuatro goles en igual cantidad de partidos. Además, hizo un hat-trick contra Grecia que aún hoy es recordado por los fanáticos del fútbol.
En 1998, a pesar de las tensiones con el entrenador Daniel Passarella, Batistuta fue convocado para la Copa Mundial de la FIFA en Francia. Anotó un impresionante hat-trick contra Jamaica, pero Argentina no logró avanzar más allá de los cuartos de final.
En total Batistuta anotó un total de 54 goles en 77 partidos con la selección argentina, convirtiéndose en el máximo goleador histórico hasta que Lionel Messi superó su récord en 2016.
Conclusión
Batigol es uno de los jugadores argentinos con una carrera más increíble. Su trayectoria está marcada por momentos épicos, goles memorables y una pasión inquebrantable por la camiseta argentina. Desde sus inicios en Newell’s Old Boys hasta su consagración en la Roma, Batistuta demostró ser un delantero letal y un ícono del deporte. Su legado perdura como un ejemplo de perseverancia, talento y amor por el juego.
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